¡A moverse, gente!
¿Sabías que moverte un poco cada día te puede cambiar la vida? Y no, no estoy hablando de salir corriendo una maratón, sino de cosas simples que podés hacer para sentirte mejor y vivir más. Así que, si estás ahí, medio tirado en el sillón, ¡esto es para vos!
¿Qué ganás moviéndote?
Primero, lo primero: el movimiento tiene un montón de beneficios. No solo te ayuda a mantener esos kilos bajo control, sino que también fortalece tus huesos, baja la presión arterial y te aleja de enfermedades como la diabetes y los problemas del corazón. Y ojo, está comprobado que las personas activas tienen entre un 20% y 30% menos de riesgo de muerte prematura. Así que, ya ves, moverse es cosa seria.
La mente también lo agradece
No es solo el cuerpo el que se beneficia. Cuando hacés ejercicio, tu mente también se siente mejor. Si andás medio bajoneado o el estrés te tiene a mal traer, la actividad física puede ser un gran aliado.
¿Sabías que te ayuda a reducir la ansiedad, mejora la memoria, te hace dormir mejor y te levanta el ánimo? Es como sumarle una sesión de terapia a tu día a día.
¿Por dónde empezar?
No hace falta que te mates en el gimnasio. Podés arrancar con una caminata, andar en bici o practicar algún deporte. Lo importante es empezar despacio: unos 60 minutos de actividad moderada tres veces por semana ya hacen la diferencia. Y si te sentís con ganas, podés ir sumando más días o intensificando el ejercicio. Lo clave es que lo disfrutes y lo hagas parte de tu rutina.
Metas a tu medida
Es fundamental ponerte metas que puedas cumplir. No te prometas cosas imposibles; empezá con pequeños objetivos y andá subiendo la apuesta de a poco. Cuando veas que podés lograrlos, vas a sentirte motivado a seguir, y así, con el tiempo, te vas a sorprender de lo mucho que avanzaste.
¡A moverse se ha dicho! La verdad no hay excusas para no moverse. Es fácil, no cuesta nada y los beneficios son inmensos. La próxima vez que te tiente quedarte en casa sin hacer nada, acordate de lo bien que te hace moverte. ¡Vamos, no te quedes quieto!
Darío Herrera, Personal Trainer
